Llevamos años que aparcar el coche especialmente en las grandes ciudades se ha convertido en todo un desafío. Buscar un hueco en la calle es una circunstancia que genera unos niveles elevados de estrés importantes entre los conductores.
Gracias a la tecnología IoT, que surge para facilitar la vida y hacer el día a día más sencillo a los usuarios, han ido apareciendo soluciones para ayudar a que los conductores puedan aparcar de forma más inteligente.
Este tipo de tecnología de aparcamiento inteligente con IoT funciona a través de unos sensores que son los que recaban determinada información sobre el estado del tráfico, las carreteras, los sitios disponibles o la movilidad en un momento determinado.
Por otro lado, también los parkings inteligentes trabajan con Big Data, recopilando gran contenido de datos y así poder ofrecer soluciones personalizadas para cada usuario en tiempo real.
La mayoría de las ciudades españolas ya han puesto en marcha sus propios proyectos de aparcamiento inteligente. Uno de los ejemplos es el proyecto Madrid Central, donde los coches contaminantes solo pueden acceder a esta zona si estacionan en los parkings públicos.
Así buscar aparcamiento se convierte en una herramienta muy útil para los conductores. De hecho, Madrid Central cuenta con su propia app que va indicando en tiempo real las plazas de aparcamiento disponibles en cada momento.
3 beneficios del aparcamiento inteligente con IoT
1. Se reduce el tiempo de conducción
En primer lugar, uno de los principales beneficios del parking inteligente es que disminuye el tiempo de conducción, y consecuentemente se reducen los niveles de estrés dentro del vehículo.
Como consecuencia se consigue llegar puntual a nuestro destino, ya sea el trabajo, centro de estudios o cualquier otro sitio donde haya que estar puntual. Además de aprovechar al máximo el tiempo.
2. Disminuye los niveles de estrés
Tener un porcentaje elevado de seguridad del tiempo que se emplea en la conducción reduce considerablemente los niveles de estrés entre los conductores y permite aprovechar el tiempo al máximo para otras actividades.
3. Baja los niveles de contaminación
Buscar aparcamiento supone tener el vehículo en marcha y aumentar los niveles de contaminación. Esta situación, con el aparcamiento inteligente, y teniendo claro donde debemos aparcar, reduce considerablemente la contaminación.